domingo, 19 de agosto de 2012

10-KAMADA EKADASI

10 - KAMADA
EKADASI

Sri Suta Goswami dijo: !Oh, sabios!, permitan que ofrezca mis humildes y respetuosas reverencias al Supremo Señor Hari, Bhagavan Sri KRISHNA el hijo de Devaki y Vasudeva que por su misericordia yo puedo describir el ayuno que remueve toda clase de pecados. Grandes sabios han seleccionado estas narraciones de los diez y ocho purana. Ellos son verdaderamente sublimes.
Yudhisthira Maharaja dijo: !Oh, Señor KRISHNA!, !Oh, Vasudeva!, por favor acepta mis humildes obediencias. Por favor descríbeme el Ekadasi que ocurre durante el mes de Caitra (Marzo - Abril). ¿Cuál es su nombre y cuáles son sus glorias?.
El Señor Sri KRISHNA respondió: !Oh, Yudhisthira!, por favor escúchame a mi atentamente como yo relato la antigua historia del sagrado Ekadasi, una historia de Vasistha Muni que una vez fue relatada al rey Dilipa el gran abuelo del Señor Ramachandra. Una vez el Rey Dilipa le preguntó al gran sabio Vasistha: !Oh, sabio brahmana!, yo deseo escuchar acerca del Ekadasi que ocurre durante el mes de Chaitra por favor descríbelo a mí. Vasistha Muni replicó: !Oh, Rey!, tu inquisitoría es gloriosa. El Ekadasi que ocurre durante la quincena de Chaitra es llamada Kamada Ekadasi. Este Ekadasi consume todos los pecados. !Oh, Rey!, ahora escucha un incidente de una historia que tiene tanto mérito que remueve todos los pecados simplemente por ser escuchada.
Una vez, existía una ciudad llamada Ratnapura. El Rey Pundarika era el rey de este hermoso reino que agrupaba muchos Gandharvas, Kinnaras y Apsaras entre sus ciudadanos. Entre los Gandharvas estaba Lalita y su esposa Lalitá, quien era una danzarina especial. Estos dos eran sumamente atractivos para todos y su casa estaba llena de gran riqueza y fina comida. Lalitá amaba a su querido esposo y así mismo él constantemente pensaba en ella en su corazón.
Una vez en la corte del rey Pundarika muchos gandharvas estaban cantando y Lalita estaba cantando solo, sin su esposa. Lalita cantó el final de la canción inapropiadamente, y una de las envidiosas serpientes quien estaba atendiendo la corte del rey se quejó al rey de que Lalita estaba absorto en pensar en su esposa en vez de en su soberano. El rey entonces se volvió furioso de escuchar esto y sus ojos se tornaron rojos de rabia. De repente él exclamó: !Oh, tonto bribón!, porque tú estas pensando lujuriosamente en una mujer en vez de pensar en tu rey, yo te maldigo para que te conviertas en un caníbal. !Oh, Rey!, Lalita inmediatamente se volvió en un feroz caníbal, un gran demonio que aterrorizaba y asustaba a todos.
Sus brazos medían ocho millas de largo, su boca era como una gran cueva, sus ojos eran como el sol y la luna y sus huecos de la nariz parecían enormes hoyos en la tierra, su cuello era una verdadera montaña y su cuerpo media sesenta y cuatro millas de altura. De ese modo Lalita, el amado cantante Gandharva tuvo que sufrir la reacción de su ofensa al rey Pundarika. Mirando a su esposo sufrir como un horrible caníbal Lalitá se volvió sumergida con dolor. Ella pensó ahora que mi querido esposo está sufriendo los efectos de la maldición del rey ¿qué es lo que va ha ser mi suerte? ¿Qué podría yo hacer? ¿Dónde podría yo ir?. De esa manera Lalitá sufría día y noche. En vez de disfrutar la vida como una esposa de un gandharva, ella tenía que vagar cada sitio de la jungla con su esposo monstruoso, quien había caído completamente a la maldición del rey. Viendo así a su querido esposo asi en esa terrible condición, Lalitá empezó a llorar. Por buena fortuna, sin embargo Lalitá fue al sabio Sringi un día. El estaba sentado en la cumbre de una hermosa colina llamada Vindhyachala. Acercándose a el, lla inmediatamente ofreció al asceta sus respetuosas reverencias. El sabio dio cuenta que ella estaba triste ante el y dijo: !Oh, bellísima dama!, ¿quién eres tú? y ¿por qué te has venido aquí? por favor dime cada cosa en verdad. Lalitá respondió: !Oh, gran Sabio!, yo soy la hija del Gran Gandharva Viradhanva y mi nombre es Lalitá. Yo camino en el bosque con mi esposo que el ha sido maldecido a ser un hombre demoníaco. !Oh, brahmana!, yo estoy grandemente asustada de ver esa terrible forma y actitud pecaminosa. !Oh, maestro!, por favor dime como yo puedo ejecutar algún tipo de austeridad en beneficio de mi esposo. ¿Qué actividades piadosas puedo yo ejecutar para librarlo de esta terrible forma demoníaca? !Oh, mejor de todos los brahmanas!. El sabio respondió: !Oh virgen celestial! hay un Ekadasi llamado Kamada que ocurre en la quincena del mes de Chaitra. Esto comienza pronto, quienquiera que ayune en este día tiene sus deseos satisfechos. Si tú observas este Ekadasi de acuerdo con las reglas y regulaciones y concedes el mérito para que tu esposo quedase libre de la maldición. Lalitá fielmente observó el ayuno de Kamada Ekadasi de acuerdo a las instrucciones del sabio Sringi y en Dvadasi ella apareció ante él y la Deidad de Vasudeva y dijo: Yo fielmente he observado el ayuno de Kamada Ekadasi por el mérito ganado a través de la observancia de este ayuno permite que mi esposo pueda quedar libre de la maldición. Podrá el merito que yo he ganado de esta forma librarlo de esta forma de miseria. Tan pronto como Lalita terminó de hablar su esposo quien estaba cerca quedó libre de la maldición. El inmediatamente ganó su original forma como la de Gandharva Lalita, un grupo cantante celestial adornado con muchos ornamentos hermosos. Ahora con su esposa Lalitá, él pudo disfrutar más opulencia que antes. Todo esto estaba acompañado por el poder y gloria de Kamada Ekadasi.
El Señor KRISHNA concluyó: !Oh, Yudhisthira!, El mejor de todos los reyes quienquiera que escucha esta maravillosa narración, y observa el santo Kamada Ekadasi de corazón con todo su talento dispensará muchas bendiciones al devoto fiel. Yo he descrito de esa forma sus glorias a tí para el beneficio de toda la humanidad. No hay mejor Ekadasi que el Kamada Ekadasi. Esto puede erradicar los pecados de matar un brahmana y así tambien anular las maldiciones demoníacas y purifica la conciencia. En todos los tres mundos entre los seres vivientes móviles e inmóviles no hay mejor Ekadasi que este.
De esa manera termina la narración de las glorias de Chaitra-Sukla Ekadasi o Kamada Ekadasi de Varaha Purana.

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