miércoles, 10 de noviembre de 2010

¿QUÈ Y QUIÈNES SOMOS NOSOTROS?

¿QUÉ Y QUIENES SOMOS NOSOTROS?
En este mundo material, todos experimentamos tres planos de existencia: el mundo físico, el mundo mental y el mundo intelectual. El mundo físico es el lugar donde nos hallamos, el mundo de nuestra experiencia, luego está el mundo de la adquisición mental, este es el soporte, el fundamento de nuestra experiencia. Nuestra presente posición de la experiencia es el resultado de nuestra adquisición mental. El hecho de que estemos aquí en el mundo de la experiencia no es accidental, hemos adquirido esta posición por nuestro karma previo. La esfera física, este mundo de nuestra experiencia presente, es únicamente el producto –el resultado- de nuestros impulsos mentales previos. Y a esto se le llama el mundo sutil o la esfera mental.

El mundo mental indica aceptación y rechazo, que hacer y que no hacer: “me gusta esto, no me gusta aquello”. Por otra parte, hay un plano superior, el plano de la decisión, el mundo de la inteligencia. La inteligencia nos dice: “puede que eso te guste pero no lo hagas porque saldrás perdiendo”. Ese plano es el plano de la razón. Los tres estratos densos y sutiles de este mundo nos son mostrados por una cosa en particular: ¿Qué es eso? El alma. En realidad el que nos muestra el mundo no es el sol, si no el alma. ¿Qué es realmente lo que nos permite percibir y nos deja ver las cosas densas? Es un hecho que el sol no es quien nos ayuda a ver, vemos con la ayuda del alma. Esta referencia se halla en el Bhagavad-gita 13.34: yatha prakasayati ekah, kritsnam lokam imam ravih. El alma nos expresa este mundo tal como el sol lo hace a nuestros ojos. El sol puede mostrar el color a nuestros ojos, el oído puede revelar el mundo sonoro, y la mano puede revelar el mundo del tacto. Pero realmente en el centro está el alma. Es el alma quien da luz a este mundo, quien nos proporciona un entendimiento del medio ambiente, el mundo de la percepción. Toda percepción es posible únicamente debido al alma. Aquí, “alma” quiere decir alma individual. El alma individual es la causa de su mundo. No debemos pensar que la mente se halla en el mundo sino que el mundo está en la mente. Si no hay sol, todo permanece oscuro y no podemos ver nada. Así, sin luz, nada puede ser visto. Y, en un sentido más elevado, “luz” significa el alma. El alma es el sujeto, y el objeto del alma son los tres planos de existencia dentro de este mundo.

Las escrituras sagradas de la India nos informan lo siguiente en relación con el alma: Tu posición constitucional es que eres un alma viviente pura. “No debes identificar a este cuerpo como tu verdadero yo. Tu verdadera identidad no es tu mente, ni tu inteligencia, ni tu ego falso. Tu identidad es ser sirviente eterno del Supremo Señor Krishna o Dios. Tu posición es que eres trascendental. La energía superior de Krishna es espiritual por constitución, y la energía externa inferior es material. Siendo que te encuentras entre la energía material y la energía espiritual, tu posición es marginal. Perteneciendo a la potencia marginal de Krishna, eres simultáneamente igual a Krishna y diferente de Él”. Esta igualdad y diferencia simultánea siempre existe en la relación entre las entidades vivientes y el Señor Supremo. A partir de la posición marginal de las entidades vivientes, puede ser entendido este concepto de “simultáneamente igual y diferente”. La entidad viviente es exactamente como una partícula molecular de la luz solar, mientras que a Krishna o Dios se le puede comparar con el deslumbrante y brillante Sol mismo. Se puede comparar a las entidades vivientes con las deslumbrantes chispas de un fuego y al Señor Supremo con el deslumbrante fuego del Sol.

En las Escrituras sagradas de las grandes tradiciones religiosas del mundo, Dios recibe distintos nombres de conformidad a Sus infinitos atributos, cualidades y obras. En la Biblia se lo llama Jehová, palabra que significa “el omnipotente”. El Corán se dirige a Él mediante el uso de la voz Alá, que quiere decir “el más grande”. Y en la Bhagavad-gita, el texto religioso más importante de la cultura hindú, a Dios se le da el nombre de Krishna, que significa “el supremamente atractivo y La Hermosa Realidad”.

Dentro de este brahmanda, o universo, existen infinidad de entidades vivientes que, conforme a sus propias actividades, están transmigrando de una especie de vida a otra y de un planeta a otro. De esa manera, su enjaulamiento en la existencia material ha estado ocurriendo desde tiempo inmemorial. En realidad, estas entidades vivientes son partes integrales atómicas del espíritu supremo. En El Srimad-Bhagavatam se dice que la dimensión del alma espiritual es aproximadamente la diezmilésima parte de la punta de un cabello; en otras palabras, es tan pequeña que es invisible. Esto también se confirma en El Svetasvatara Upanishad. En el Décimo Canto de El Srimad-Bhagavatam (10.87.30), uno de los cuatro Kumaras, conocido como Sanandana, pronunció las siguientes palabras al ejecutar un gran sacrificio: “¡Oh, Verdad Suprema! Si las entidades vivientes no fueran chispas infinitesimales del espíritu supremo, cada diminuta chispa sería omnipresente y no estaría controlada por un poder superior. Pero si se acepta que la entidad viviente es una parte integral diminuta del Señor Supremo, automáticamente queda controlada por una energía o poder Supremo. Ésta última es su verdadera posición constitucional, y si permanece en esa posición puede lograr la completa libertad”. Si uno comete el error de considerar que su posición es igual a la de la Suprema Personalidad de Dios, queda contaminado por la doctrina de la “no dualidad”, y sus esfuerzos en la vida trascendental resultan infructuosos.

Las entidades vivientes eternamente condicionadas pueden dividirse en dos clases: móviles e inmóviles. Aquellas entidades vivientes que no pueden moverse, como por ejemplo los árboles, que permanecen en un sólo lugar, son clasificadas como entidades inmóviles; y aquellas que se mueven, tal como las aves y las bestias, se denominan jangama (entidades móviles) y se subdividen en tres categorías: las que vuelan por el cielo, las que nadan en el agua y las que caminan en la tierra. De los muchos millones y trillones de entidades vivientes que existen sobre la Tierra, los seres humanos constituyen únicamente una pequeña porción. De ese pequeño número de seres humanos, la mayoría son totalmente ignorantes en cuanto a la vida espiritual, tienen hábitos sucios y carecen de fe en la existencia de la Suprema Personalidad de Dios. En otras palabras, la mayoría de los seres humanos viven como animales. Este último grupo, de hecho, se puede deducir del número de seres humanos que constituyen la vida humana o civilizada. Es muy difícil encontrar unos pocos seres humanos que crean en las Escrituras y en la existencia de Dios, o que al menos acepten seguir un comportamiento correcto. Aquellos que creen en los valores de estas cosas son conocidos como arya, una palabra que designa a las personas que tienen interés en el progreso de la vida espiritual. De aquellos que creen en el valor de las Escrituras y en el adelanto de la civilización humana, hay dos clases: los honrados y los inicuos. Aquellos que son honrados por lo general ejecutan actividades fruitivas con el fin de obtener algún resultado bueno para la complacencia de los sentidos. De muchas de estas personas que se dedican a las actividades honradas para la complacencia de los sentidos, únicamente unas pocas llegan a saber de la Verdad Absoluta. Éstos reciben el nombre de jñanis o filósofos empíricos. De muchos cientos y miles de filósofos empíricos, solamente un puñado, de hecho, logra la liberación. Cuando uno está liberado entiende teóricamente que la entidad viviente no está compuesta de elementos materiales, sino que es alma espiritual, distinta de la materia. Con sólo entender teóricamente esta doctrina, a uno se le puede llamar liberado, pero en realidad un mukta, o alma liberada, es aquel que entiende su posición constitucional como un sirviente eterno del Señor. Estas almas liberadas se dedican con fe y devoción al servicio del Señor y reciben el nombre de krishna-bhaktas, o personas conscientes de Krishna o Dios.

Los krishna-bhaktas están libres de todos los deseos materiales. Aquellos que están teóricamente liberados por el simple hecho de saber que la entidad viviente no es materia, pueden ser clasificados entre las almas liberadas; no obstante, ellos tienen deseos materiales. El principal deseo que ellos tienen es el de volverse uno con la Suprema Personalidad de Dios. Por lo general esas personas están muy apegadas a los rituales védicos y a las actividades virtuosas, todo lo cual realizan con el fin de disfrutar de prosperidad material. Incluso cuando algunos de ellos trascienden el disfrute material, aun así tratan de disfrutar del mundo espiritual fusionándose en la existencia del Señor Supremo. Algunos de ellos también están deseosos de obtener poderes místicos a través de la ejecución del yoga. Mientras esos deseos estén en el corazón de uno, no puede entenderse la naturaleza del servicio devocional puro. Mientras uno se vea constantemente agitado por esos deseos, no le será posible lograr la paz. En efecto, mientras haya cualquier deseo por alguna perfección material no se puede estar en paz. Como los devotos del Señor Krishna o Dios no desean nada material, son las únicas personas apacibles que hay en este mundo material. Esto se confirma en El Srimad-Bhagavatam (6.14.5): “Oh, gran sabio, de muchos millones de personas liberadas y personas que han logrado el éxito en el yoga místico, alguien que esté completamente consagrado a la Suprema Personalidad de Dios y que esté colmado de paz, es muy difícil de encontrar”.

De entre los muchos miles y millones de entidades vivientes que deambulan por el mundo material, aquella que por la gracia del Señor Krishna y del maestro espiritual recibe la semilla del servicio devocional es muy afortunada y difícil de encontrar. El hombre piadoso o religioso por lo general se inclina a adorar deidades en diversos templos, pero si por casualidad, aun inconscientemente, le ofrece sus reverencias al Señor Vishnu o recibe la gracia de un vaishnava, de un devoto del Señor, en ese momento adquiere el requisito necesario para acercarse a la Suprema Personalidad de Dios. Eso se entiende claramente con la historia de la vida del gran sabio Narada, la cual se relata en El Srimad-Bhagavatam. Por el hecho de servir a los vaishnavas en su vida anterior, Narada fue favorecido por los devotos del Señor y se convirtió en un gran sabio. En efecto, entre los sabios, a Narada Muni se le considera el más grande de todos.

Los vaisnavas, o devotos, son por lo general muy compasivos con las almas condicionadas. Sin ni siquiera ser invitado, el devoto va de puerta en puerta para iluminar a la gente y sacarla de la oscuridad de la nescencia mediante la inyección de conocimiento acerca de la posición constitucional de la entidad viviente como servidora del Señor Krishna. Esos devotos son facultados por el Señor para distribuirles conciencia devocional o conciencia de Krishna o Dios a la generalidad de la gente. Ellos son conocidos como maestros espirituales autorizados, y es por su misericordia que el alma condicionada recibe la semilla del servicio devocional. La misericordia sin causa de la Suprema Personalidad de Dios se aprecia principalmente cuando uno se pone en contacto con un maestro espiritual genuino que puede llevar al alma condicionada a la máxima posición de la vida devocional. Por la misericordia del maestro espiritual uno puede obtener la misericordia sin causa del Señor, y por la misericordia de la Suprema Personalidad de Dios uno puede obtener la misericordia del maestro espiritual genuino.

Así pues, por la misericordia del maestro espiritual y de Krishna, uno recibe la semilla del servicio devocional. Únicamente hay que plantar la semilla en el campo del corazón exactamente como un jardinero planta la semilla de un árbol valioso. Después de plantar esa semilla, uno tiene que regarla en la forma del proceso de cantar y oír el santo nombre del Señor Supremo, o participando en discusiones acerca de la ciencia del servicio devocional en la asociación de devotos puros. Cuando la planta del servicio devocional brota de la semilla de la devoción, comienza a crecer libremente. Cuando ha crecido por completo, sobrepasa los límites de este universo y entra en la atmósfera trascendental, donde la refulgencia del brahmajyoti lo baña todo. La planta penetra incluso ese brahmajyoti y gradualmente entra en el planeta conocido como Goloka Vrindavana. Allí, la planta se refugia a los pies de loto de Krishna o Dios. Ésa es la meta última del servicio devocional. Después de alcanzar esa posición, la planta produce su fruto, conocido como el fruto del amor por Dios. Sin embargo, es necesario que el devoto o el jardinero trascendental vierta agua en la planta diariamente mediante el proceso de cantar y oír. A menos que uno riegue la planta mediante este proceso de cantar y oír, existe toda posibilidad de que se seque.

¿Por qué fueron creadas las pequeñas partículas de espíritu?”. La respuesta es que la Suprema Verdad Absoluta es completa en Su perfección, siendo que Él es tanto infinito como infinitesimal. Si Él simplemente fuese infinito y no fuese infinitesimal, no sería perfecto. La porción infinita es el Vishnu-tattva, o sea la Suprema Personalidad de Dios, y la porción infinitesimal es la entidad viviente.

Debido a los infinitos deseos de la Suprema Personalidad de Dios, hay existencia en el mundo espiritual, y debido a los deseos infinitesimales de la entidad viviente, hay existencia en el mundo material. Cuando las entidades vivientes infinitesimales se ocupan en sus deseos infinitesimales para el disfrute material, se les llama jiva-sakti, pero cuando se acoplan con el infinito, se les llama almas liberadas. No hay necesidad, por lo tanto, de preguntar por qué Dios creó a las porciones infinitesimales, ellas simplemente son las partes complementarias del Supremo. Es indudablemente esencial para el infinito tener las porciones infinitesimales, las cuales son partes integrales inseparables del Alma Suprema. Debido a que las entidades vivientes son partes integrales infinitesimales del Supremo, existe una reciprocidad de sentimientos entre el infinito y lo infinitesimal. No habiendo entidades vivientes infinitesimales, el Señor Supremo tendría que estar inactivo y no habría variedad en la vida espiritual. Así como un rey sin súbditos carece de significado, de la misma manera, no existe significado para el Dios Supremo si no hay entidades vivientes infinitesimales. ¿Cómo puede haber significado para la palabra “señor” si no hay nadie sobre quien enseñorearse? La conclusión es que a las entidades vivientes se les considera las expansiones de la energía del Señor Supremo, y el Señor Supremo, la Personalidad de Dios, Krishna, es el energético.

Nosotros somos por constitución, energía marginal de Dios o Krishna, por consiguiente no nos podemos sostener con nuestros propios pies. Debemos tener un refugio –o terrenal dentro de la identificación mundana, o más allá de eso, debemos tener un refugio más arriba de nuestras cabezas-. ¡Oh alma espiritual, debes de tener un refugio en la tierra de la felicidad, la dulzura, el amor, la belleza y la misericordia, donde vive Dios o Krishna y sus asociados eternos, el destino final! RESTABLEZCÁMONOS EN NUESTRA POSICIÓN GLORIOSA COMO ALMAS ESPIRITUALES.

El Bhagavad-gita se acepta como una de las más brillantes estrellas del horizonte del cielo espiritual. El Bhagavad-gita significa “La Canción de Dios”. A continuación en relación con el alma les expondremos los versos 13, 17, 19 y 20 al 30 del capítulo segundo del Bhagavad-gita:

(13) Así como en este cuerpo el alma encarnada pasa continuamente de la niñez a la juventud y luego a la vejez, de la misma manera el alma pasa a otro cuerpo en el momento de la muerte. A la persona sensata no la confunde ese cambio.

(17) Sabed que aquello que se difunde por todo el cuerpo es indestructible. Nadie puede destruir a esa alma imperecedera.

(19) Tanto el que cree que la entidad viviente es la que mata como el que cree que ésta es matada, carecen de conocimiento, pues el ser ni mata ni es matado.

(20) Para el alma no existe el nacimiento ni la muerte en ningún momento. Ella no ha llegado a ser, no llega a ser y no llegará a ser. El alma es innaciente, eterna, permanente y primordial. No se la mata cuando se mata el cuerpo.

(21) ¡Oh, Partha!, una persona que sabe que el alma es indestructible, eterna, innaciente e inmutable, ¿cómo puede matar a alguien o hacer que alguien mate?

(22) Así como una persona se pone ropa nueva y desecha la vieja, así mismo el alma acepta nuevos cuerpos materiales, desechando los viejos e inservibles.

(23) Al alma nunca puede cortarla en pedazos ningún arma, ni puede el fuego quemarla, ni el agua humedecerla, ni el viento marchitarla.

(24) Esta alma individual es irrompible e insoluble, y no se la puede quemar ni secar. El alma está en todas partes, y es sempiterna, inmutable, inmóvil y eternamente la misma.

(25) Se dice que el alma es invisible, inconcebible e inmutable. Sabiendo esto, no debes afligirte por el cuerpo.

(26) Sin embargo, si crees que el alma [o el conjunto de las señales de vida] nace siempre y muere para siempre, aun así no tienes por qué lamentarte, ¡oh, tú, el de los poderosos brazos!

(27) Aquel que ha nacido, es seguro que va a morir, y, después de morir, es seguro que uno volverá a nacer. Por consiguiente, en el ineludible desempeño de tu deber, no debes lamentarte.

(28) Todos los seres creados son no manifiestos en el comienzo, manifiestos en el ínterin, y de nuevo no manifiestos cuando son aniquilados. Entonces, ¿qué necesidad hay de lamentarse?

(29) Algunos consideran que el alma es asombrosa, otros la describen como asombrosa, y otros más oyen hablar de ella como algo asombroso, mientras que hay otros que, incluso después de oír hablar de ella, no logran comprenderla en absoluto.

(30) ¡Oh, descendiente de Bharata!, aquel que mora en el cuerpo nunca puede ser matado. Por lo tanto, no tienes que afligirte por ningún ser viviente.

A continuación les exponemos un bello poema de Srila Bhaktivinoda Thakura (1838-1914).
EL ALMA

¡Ay! de quienes sus días se gastan
en fiestas, gozos y bromas
efulgentes formas a ellos aplastan
al capturar sus corazones.

Botellas brillantes los encantan
las abrazan en su corazón
de la desgracia no se levantan
esclavos del alcohol son.

¿Fue destinado el hombre a ser
bruto en su sentir y obrar?
¿Puede el hombre señor de todo
su sentido común dejar?.

La gloria del hombre está en verdad
como su gracia nos dice de ello
que fue hecho para vivir y amar
el abrazo del cielo tan bello.

¡Ay! esta carne no es nuestra
encadenada por el cuerpo mortal
el alma atada a faltas pasadas
despierta !oh! alma espiritual.

Este juego infantil porque será
como nada en verdad es nuestro
en cien años todo caerá
así como las rosas muertas.

Rosado destello es la vida
pero pronto a la nada llegará
sólo el alma vive por siempre
acciones buenas o malas pagará.

¡Oh! profundo el pensamiento en el tiempo?
¿cuán grave parece su aspecto?
con gran reverencia envuelta la naturaleza estudia con respeto.

Oscuro problema es la vida
pantalla a izquierda y derecha
nunca hizo un alma su venida
a relatar lo que jamás fue visto.

Entonces una suave voz interna
que dentro de nosotros existe
dice hombre! eres alma eterna
que a ti la muerte no afecte.

Tu Señor para ti allá arriba
guarda felicidad sin igual
el más puro amor le debes dar
sólo eres de El sin tiempo final.

¡Oh amor! haz que tu bondad y poder
unan mi alma al Señor mis palabras burdas no pueden captar
los sentimientos dulces por tu resplandor

Placer y aflicción no son míos
sino herencia de esta carne mortal
sólo el alma que duerme dirá
que la ganancia vendrá al final.

No llores por toda bajeza
ahora ¡acaben las fiestas!
mujeres, vino y carne de bestias
amor jamás te darán.

Debes amar a tu hermano
y tu mismo entregarte al Señor
ya Dios sabe de antemano
qué mereces por cada acción.

Olvida el pasado que duerme
no guardes sueño: del futuro
actúa en el tiempo que tienes
y tu progreso vendrá seguro.

No me digas con mente fría
que el alma está hechapor leyes mecánicas, principios sin vida
destinada a la destrucción.
Sólo Dios que nos dio la vida puede al alma poner su fin o darle todas las dichas de arriba y así Su promesa cumplir.
Marcha hacia adelante ¡oh alma!
contra toda acción del mal
que se alza con odio y lujuria
¡sé un héroe hasta el final!
Mantente en el mundo espiritual
tan firme como seas capaz
la materia no te haga bajar.
Héroe ¡no caigas jamás!
¡Oh alma saragrahi vaisnava!
tu eres un ángel radiante llévame, llévame a Vrindavana
y el poder espiritual expande.
Reposa mi alma liberada, allí,
en los brazos de mi Amado
paz eterna y amor espiritual
tienen mi canto encantado...

ENTREVISTA CON EL ALMA
¿Dé dónde eres? Del mundo espiritual. ¿Y qué haces aquí en el mundo material? Intenté disfrutar de la materia, pero me he frustrado y ahora quiero volver otra vez al mundo espiritual. ¿Cómo sabes que eres del mundo espiritual? Lo dicen las escrituras sagradas de todo el mundo, lo dicen todas las personas santas y lo dicen todos los maestros espirituales genuinos. ¿Qué son las escrituras sagradas? Son las leyes dadas por Dios. El a pesar que le hemos dado la espalda, es tan bondadoso que nos da las escrituras sagradas; practicándolas podemos vivir aquí pacíficamente y prepararnos para volver al mundo espiritual. ¿Qué son las personas santas? Son aquellas personas que siguen estrictamente las escrituras sagradas, han experimentado que este mundo material es un lugar de sufrimiento y temporal, y en vez de vivir para su egoísmo, “yo y lo mío,” ahora viven solamente para complacer a Dios y como Dios es la totalidad completa, ellos complacen a todos.

Las cualidades de estas personas santas son: la tolerancia, la misericordia y la amistad con todos. ¿Y quién es un maestro espiritual genuino? Es una persona que ha sido muy seria y sincera en cuanto a complacer a su maestro espiritual, y por eso ha recibido las bendiciones de su maestro espiritual. Eso la capacita para ser un maestro espiritual genuino dentro de la cadena de sucesión discipular. ¿Qué es la sucesión discipular? Es la cadena de maestros espirituales genuinos que viene desde Krishna o Dios hasta nuestros días. Por medio de esa cadena de sucesión discipular, Dios hace descender su mensaje. ¿Y cuál es el precio del billete para ir al mundo espiritual? El precio del billete es tener un gran deseo o un gran anhelo de ir allí.

La civilización bestial de comer, dormir, temer y complacer los sentidos, ha descarriado al hombre moderno, haciéndole olvidar cuán poderosa alma tiene. El alma es una chispa espiritual que es muchas, muchas veces más iluminadora, refulgente y poderosa que el Sol, la Luna o la electricidad. La vida humana se arruina cuando una persona no comprende su verdadera identidad con su alma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario