Un océano de misericordia

 Un océano de misericordia, por Haripada dasa

Srila Prabhupada es un océano de misericordia. El maestro espiritual recibe la bendición del océano de misericordia. Tal como una nube derrama agua sobre un incendio forestal para apagarlo, el maestro espiritual libera al afligido mundo material extinguiendo el fuego abrasador de la existencia material. Le ofrezco respetuosas reverencias a los pies de loto de ese maestro espiritual, que es un océano de cualidades auspiciosas.

Comparto una historia muy conmovedora, estábamos en Vrindavana, India, en la casa de unos devotos italianos, estábamos respetando unas pizzas maha-prasada, llegó una discípula muy antigua de Srila Prabhupada, no recuerdo su nombre, pero sé que era la esposa de Lohitaksa, ella nos contó que Srila Prabhupada estaba en el templo de Nueva York y le estaban haciendo el guru puja, de repente una persona con el cabello muy largo y con barba y muy sucio entró al templo como si fuera un perro a cuatro patas, se dirigió hacía Srila Prabhupada, Srila Prabhupada lo reconoció enseguida, y llorando a los pies de loto de Srila Prabhupada le dijo varias veces que perdóname te he fallado, Srila Prabhupada llorando le acariciaba la cabeza, y todos los devotos en el guru puja estaban llorando, luego esa persona se fue y nunca nadie supo de él.

Hace unos años estaba hablando con un guru de Iskcon en Vrindavana, India, él me dijo a mí que Srila Prabhupada se desvió del guru-parampara al ordenar que sus discípulos iniciaran en su nombre o la filosofía Ritvik, ya que esta filosofía no viene en los Sastras o Escrituras, cuando yo escuché esto pensé que esta persona tiene menos inteligencia que un mosquito, le dije que Srila Prabhupada distribuye su misericordia a todo el mundo, pero si tú no quieres obtenerla, la culpa es tuya, Srila Prabhupada ordenó a sus discípulos que iniciaran en su nombre, esto está respaldado con un documento especial que Srila Prabhupada mandó a todo Iskcon desde Vrindavana, India, el 9 de julio 1977, cualquier persona puede leer este documento,  y si vosotros no queréis obedecer esta orden , la culpa no es de Srila Prabhupada sino de vosotros. También le dije que según el Harinama-chintamani, que el resultado de ofender al guru es que uno se vuelve un mayavadi o ateo. Luego pasaron unos años y también en Vrindavana nos vimos, y él me dijo que perdón por lo que te dije hace varios años, yo le contesté que a mí no me debes de pedir perdón, sino a Srila Prabhupada.