Srila Prabhupada, por Javier Figuerola o Haripada dasa
Si tu pones en google Srila Prabhupada te saldrán más de medio millón de enlaces. Srila Prabhupada a la edad de 69 años salió de la India hacía USA para cumplir la orden que le dio su Maestro Espiritual de difundir el mensaje de la conciencia de Krishna en el idioma inglés. Se puso a cantar el Maha-mantra: Hare Krishna, Hare Krishna, Krishna Krishna, Hare Hare / Hare Rama, Hare Rama, Rama Rama, Hare Hare en un parque de Nueva York y ahí empezó su movimiento, muchos jóvenes se acercaron a él para recibir entrenamiento espiritual. Muchas personas abandonaron la vida sexual ilícita, los juegos de azar, las drogas y el consumo de carnes, pescados y huevos y cantaron cada día 27.648 nombres de Dios en sus rosarios. Estas personas sentían tanta felicidad espiritual que de una manera natural querían ayudar a Srila Prabhupada a difundir su movimiento para que todo el mundo fuera feliz. Srila Prabhupada inició a 10.000 discípulos en todo el mundo, le pegó la vuelta al mundo 14 veces, escribió 80 libros de 400 páginas cada uno, abrió más de cien templos en todo el mundo y muchas comunidades agrícolas. Dormía cada día 3 horas desde las 10 de la noche hasta la 1 de la madrugada, ahí se levantaba para traducir los grandes clásicos de la India como el Srimad Bhagavatam y el Sri Chaitanya Charitamrita, sus discípulos y admiradores han distribuído más de 500 millones de sus libros en todos los idiomas del mundo. Srila Prabhupada es Acharya eso significa aquel que predica con su ejemplo personal. Como dice el dicho las palabras convencen pero el ejemplo arrastra.
Srila Prabhupada profetizó en sus libros que cuando el Acharya se va vuelve el desorden y así sucedió, Srila Prabhupada antes de desencarnar estaba muy enfermo y llegó a decir que me están envenenando. Cuando Srila Prabhupada desencarnó sus discípulos cambiaron sus libros, apoyaron a los violadores de niños, se hicieron gurus sin tener la autorización de Srila Prabhupada y hubo un devoto llamado Sulochana que denunció todo escribiendo un libro titulado el negocio del guru y uno de los gurus lo mató. Ahí podeis ver las cosas tan abominables que pueden hacer las personas solo por querer poder, controlar y explotar a los demás. Gracias a Dios que hay muchas personas en todo el mundo que se han dado cuenta de todas estas atrocidades y siguen a Srila Prabhupada sin la asociación de todos los que están ofendiendo a Srila Prabhupada. Srila Prabhupada sacrificó su vida para el bien de los demás sin querer nada a cambio, pero las personas han convertido su movimiento en una película de terror. Los supuestos discípulos de Srila Prabhupada piensan que solo son ellos discípulos de Srila Prabhupada y los demás no son discípulos de Srila Prabhupada, para mí pensar así es una extensión de su ego falso. A esas personas hay que ignorarlas.
Canta el Maha-mantra: Hare Krishna, Hare Krishna, Krishna Krishna, Hare Hare / Hare Rama, Hare Rama, Rama Rama, Hare Hare y sé feliz.
Sirve a Srila Prabhupada con amor, fe, apego y agradecimiento y tu vida será exitosa y sublime.
Si tu pones en google Srila Prabhupada te saldrán más de medio millón de enlaces. Srila Prabhupada a la edad de 69 años salió de la India hacía USA para cumplir la orden que le dio su Maestro Espiritual de difundir el mensaje de la conciencia de Krishna en el idioma inglés. Se puso a cantar el Maha-mantra: Hare Krishna, Hare Krishna, Krishna Krishna, Hare Hare / Hare Rama, Hare Rama, Rama Rama, Hare Hare en un parque de Nueva York y ahí empezó su movimiento, muchos jóvenes se acercaron a él para recibir entrenamiento espiritual. Muchas personas abandonaron la vida sexual ilícita, los juegos de azar, las drogas y el consumo de carnes, pescados y huevos y cantaron cada día 27.648 nombres de Dios en sus rosarios. Estas personas sentían tanta felicidad espiritual que de una manera natural querían ayudar a Srila Prabhupada a difundir su movimiento para que todo el mundo fuera feliz. Srila Prabhupada inició a 10.000 discípulos en todo el mundo, le pegó la vuelta al mundo 14 veces, escribió 80 libros de 400 páginas cada uno, abrió más de cien templos en todo el mundo y muchas comunidades agrícolas. Dormía cada día 3 horas desde las 10 de la noche hasta la 1 de la madrugada, ahí se levantaba para traducir los grandes clásicos de la India como el Srimad Bhagavatam y el Sri Chaitanya Charitamrita, sus discípulos y admiradores han distribuído más de 500 millones de sus libros en todos los idiomas del mundo. Srila Prabhupada es Acharya eso significa aquel que predica con su ejemplo personal. Como dice el dicho las palabras convencen pero el ejemplo arrastra.
Srila Prabhupada profetizó en sus libros que cuando el Acharya se va vuelve el desorden y así sucedió, Srila Prabhupada antes de desencarnar estaba muy enfermo y llegó a decir que me están envenenando. Cuando Srila Prabhupada desencarnó sus discípulos cambiaron sus libros, apoyaron a los violadores de niños, se hicieron gurus sin tener la autorización de Srila Prabhupada y hubo un devoto llamado Sulochana que denunció todo escribiendo un libro titulado el negocio del guru y uno de los gurus lo mató. Ahí podeis ver las cosas tan abominables que pueden hacer las personas solo por querer poder, controlar y explotar a los demás. Gracias a Dios que hay muchas personas en todo el mundo que se han dado cuenta de todas estas atrocidades y siguen a Srila Prabhupada sin la asociación de todos los que están ofendiendo a Srila Prabhupada. Srila Prabhupada sacrificó su vida para el bien de los demás sin querer nada a cambio, pero las personas han convertido su movimiento en una película de terror. Los supuestos discípulos de Srila Prabhupada piensan que solo son ellos discípulos de Srila Prabhupada y los demás no son discípulos de Srila Prabhupada, para mí pensar así es una extensión de su ego falso. A esas personas hay que ignorarlas.
Canta el Maha-mantra: Hare Krishna, Hare Krishna, Krishna Krishna, Hare Hare / Hare Rama, Hare Rama, Rama Rama, Hare Hare y sé feliz.
Sirve a Srila Prabhupada con amor, fe, apego y agradecimiento y tu vida será exitosa y sublime.
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